La evidencia científica de las mejores prácticas en medicina de desastres es difícil de construir y se hace necesario implementar mucha mayor investigación para entender la mejor manera de proceder. Sin embargo, las enseñanzas de todos aquellos que han manejado estos eventos y los aprendizajes que se han podido consolidar en la literatura del tema son asunto trascendente que vale la pena recoger, documentar y socializar.
Este documento es un paso de muchos que vamos a seguir dando para documentar y difundir algo de lo que se puede aprender en medio del desastre. Quizás, más adelante, las pautas que se esbozan en algunos pasajes de este texto contribuyan a desplegar mejores esquemas de respuesta y a brindar mejores oportunidades de vida.
450 páginas
ilustraciones, fotografías
28 cm
incluye bibliografía